Jack:
¿Sabés en qué pensaba?
En que los elefantes tienen memoria, pero, así como el humano no hay
ninguna especie.
El hombre habla y es extraño. Para mí, es un misterio, un enigma. Hay
tantas cosas que no comprendo. Pero, bueno. Podemos hablar de éso y
tal vez aclarar algo. ¿Vos qué decís?
Silvia:
Acordamos bastante en este tema. A veces, es difícil saber por
qué la gente hace lo que hace, dice lo que dice, piensa lo que piensa,
siente lo que siente y a veces no es tan difícil. Es decir: a veces lo
es; a veces, no lo es. Depende de muchos factores.
Jack:
Creo que los judíos y el judaísmo están en el centro de la
escena siempre. Somos como el ombligo del mundo. Todo pasa por
nosotros y para nosotros.
Silvia:
¿Seremos paradigma de un universal difícil, complejo, humano,
comun a cualquier otro como semejante?
Jack:
¿Seremos perseguidos por nuestra identidad tan pero tan
controvertida? ¿Qué tenemos de diferente? ¿Acaso, somos qué?
Silvia:
Somos entes del humus y como tales llevamos el emblema de finitud
a "flor de letra". Además, el varón judío tiene escrito en su cuerpo
real la Circuncisión como "Pacto de Palabra", "Palabra hecha Acto".
Este cuerpo será hablado desde la "falta" como "hiancia estructural"
para cualquier otro de la especie, al modo de semejante. Tal vez, el
judío emblematice la "finitud" y por ello es tan perseguido. Recuerda
eso de lo que muchos otros nada quieren saber: la muerte. Por ende, se
persiguen con él. Por lo tanto, lo persiguen a él. El nazismo buscó
eliminar(lo) con la ilusión de erradicar la finitud. Sin saber, o más
bien sabiéndo(lo) y re-negándo(lo) que la finitud atravesaba a cada
sujeto, del que el sujeto judío sólo es paradigma.
Jack:
Me vuelve siempre lo de Arendt y su filosofía. ¿Qué dijo que haya
cambiado algo en el mundo? ¿Qué aporte del que se pueda sacar algo
valioso? ¿Acaso, no adhiere al enemigo?
Silvia:
Arendt analiza el totalitarismo en todas sus formas. Denuncia la
deshumanización y el poco criticismo que lleva a las masas a plegarse
a lo peor. Anula la subejtividad, aliena la diferencia, borra la
identidad, cambia el nombre por un número. Descubre, aún en el
victimario, así como en la víctima el mismo mecanismo: el terror, que
paraliza.
Jack:
No la comprendo. Me parece alguien que dijo lo que le convenía
decir, no la verdad. No me gustaría perder mucho tiempo hablando de ella,
En que los elefantes tienen memoria, pero, así como el humano no hay
ninguna especie.
El hombre habla y es extraño. Para mí, es un misterio, un enigma. Hay
tantas cosas que no comprendo. Pero, bueno. Podemos hablar de éso y
tal vez aclarar algo. ¿Vos qué decís?
Silvia:
Acordamos bastante en este tema. A veces, es difícil saber por
qué la gente hace lo que hace, dice lo que dice, piensa lo que piensa,
siente lo que siente y a veces no es tan difícil. Es decir: a veces lo
es; a veces, no lo es. Depende de muchos factores.
Jack:
Creo que los judíos y el judaísmo están en el centro de la
escena siempre. Somos como el ombligo del mundo. Todo pasa por
nosotros y para nosotros.
Silvia:
¿Seremos paradigma de un universal difícil, complejo, humano,
comun a cualquier otro como semejante?
Jack:
¿Seremos perseguidos por nuestra identidad tan pero tan
controvertida? ¿Qué tenemos de diferente? ¿Acaso, somos qué?
Silvia:
Somos entes del humus y como tales llevamos el emblema de finitud
a "flor de letra". Además, el varón judío tiene escrito en su cuerpo
real la Circuncisión como "Pacto de Palabra", "Palabra hecha Acto".
Este cuerpo será hablado desde la "falta" como "hiancia estructural"
para cualquier otro de la especie, al modo de semejante. Tal vez, el
judío emblematice la "finitud" y por ello es tan perseguido. Recuerda
eso de lo que muchos otros nada quieren saber: la muerte. Por ende, se
persiguen con él. Por lo tanto, lo persiguen a él. El nazismo buscó
eliminar(lo) con la ilusión de erradicar la finitud. Sin saber, o más
bien sabiéndo(lo) y re-negándo(lo) que la finitud atravesaba a cada
sujeto, del que el sujeto judío sólo es paradigma.
Jack:
Me vuelve siempre lo de Arendt y su filosofía. ¿Qué dijo que haya
cambiado algo en el mundo? ¿Qué aporte del que se pueda sacar algo
valioso? ¿Acaso, no adhiere al enemigo?
Silvia:
Arendt analiza el totalitarismo en todas sus formas. Denuncia la
deshumanización y el poco criticismo que lleva a las masas a plegarse
a lo peor. Anula la subejtividad, aliena la diferencia, borra la
identidad, cambia el nombre por un número. Descubre, aún en el
victimario, así como en la víctima el mismo mecanismo: el terror, que
paraliza.
Jack:
No la comprendo. Me parece alguien que dijo lo que le convenía
decir, no la verdad. No me gustaría perder mucho tiempo hablando de ella,
aunque a veces siento que debo hablar de éso. ¿Qué será?
Silvia:
Tal vez reconozcas un criticismo en ella que te identifica. Al
igual que vos, ella desde otra óptica critica la complicidad del
silencio, la no lucha por los ideales, la obediencia debida como
supuesto de excepción de responsabilidad penal. Quizás veas en ella
una filósofa que enuncia la deshumanización y la alienación
contemporáneas. Desde tu propio ángulo, denuncias cosas parecidas.
Jack:
Nunca se me hubiera ocurrido. Tal vez sea así. Lo que te puedo
decir es que son más las cosas que no entiendo que las que entiendo.
No sé si es que yo soy infantil en mis preguntas y/o argumentos o es
que hay algo que se me escapa. Tal vez me faltan elementos o no estoy
capacitado. ¿Vos qué pensás?
Silvia:
Creo que de infantil no tenés un pelo. Más bien sos muy
dilemático, observador y crítico. Está bueno porque apuntás a lo
irracional, a lo ilógico, descubrís el sin sentido. Mostrás las
contrariedades, las contradicciones. Polemizás permanentemente y eso
es crucial para dilucidar algo de lo oscuro. Darle luz. explicatio al
"no saber qué hacer". Es como si te plantearas el síntoma de lo que en
el Siglo XXI es mediocridad, torpeza, inescrupulosidad, inercia. La
absurdidad de las guerras, el fracaso del diálogo, de la
simbolización, la rivalidad a muerte por el avasallamiento.
Jack:
¿Seré que?
Silvia:
¿Patriarca del Siglo XXI? ¿El que pasó a ser de Yacub a ser
Isra(EL)¡ ¿Quién lucha con el malaj/ángel y le gana la batalla
cotidianamente? ¿El que lucha con la Letra, con la Palabra, con la
Ley para hacer que la Vida como mandamiento de la Torah, sea Eterna?
Jack:
"¿(...)?"
Silvia:
Tal vez reconozcas un criticismo en ella que te identifica. Al
igual que vos, ella desde otra óptica critica la complicidad del
silencio, la no lucha por los ideales, la obediencia debida como
supuesto de excepción de responsabilidad penal. Quizás veas en ella
una filósofa que enuncia la deshumanización y la alienación
contemporáneas. Desde tu propio ángulo, denuncias cosas parecidas.
Jack:
Nunca se me hubiera ocurrido. Tal vez sea así. Lo que te puedo
decir es que son más las cosas que no entiendo que las que entiendo.
No sé si es que yo soy infantil en mis preguntas y/o argumentos o es
que hay algo que se me escapa. Tal vez me faltan elementos o no estoy
capacitado. ¿Vos qué pensás?
Silvia:
Creo que de infantil no tenés un pelo. Más bien sos muy
dilemático, observador y crítico. Está bueno porque apuntás a lo
irracional, a lo ilógico, descubrís el sin sentido. Mostrás las
contrariedades, las contradicciones. Polemizás permanentemente y eso
es crucial para dilucidar algo de lo oscuro. Darle luz. explicatio al
"no saber qué hacer". Es como si te plantearas el síntoma de lo que en
el Siglo XXI es mediocridad, torpeza, inescrupulosidad, inercia. La
absurdidad de las guerras, el fracaso del diálogo, de la
simbolización, la rivalidad a muerte por el avasallamiento.
Jack:
¿Seré que?
Silvia:
¿Patriarca del Siglo XXI? ¿El que pasó a ser de Yacub a ser
Isra(EL)¡ ¿Quién lucha con el malaj/ángel y le gana la batalla
cotidianamente? ¿El que lucha con la Letra, con la Palabra, con la
Ley para hacer que la Vida como mandamiento de la Torah, sea Eterna?
Jack:
"¿(...)?"
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